Revista Insurrección No. 235
Lunes, 27 de Septiembre de 2010
El pueblo bolivariano de Venezuela tuvo otra gran batalla en el campo escogido para dirimir sus contradicciones con la oligarquía y el imperialismo: el electoral. Batiéndose a fondo por la hegemonía en la Asamblea Nacional, parlamento unicameral producto de la Constitución de 1999, resultó vencedor al tener una mayoría absoluta que le permite continuar sin peligro con los planes de gobierno y profundizar en algunas leyes que puede desarrollar, de acuerdo al número alcanzado de Diputados y Diputadas.
Optar por el consenso, la batalla de ideas, la paciente labor del convencimiento, es tarea de titanes.
Es la lucha de la verdad revolucionaria contra la manipulación, la mentira, la tergiversación, la guerra mediática y sicológica, la llamada ahora guerra de cuarta generación. Los socialistas venezolanos se enfrentan a verdaderas usinas con ingentes recursos económicos y tecnológicos, transnacionales de la desinformación, potentes generadores de mentiras y tergiversaciones, que propugnan sin escrúpulos por la continuidad del capitalismo, de la explotación.
La vía pacífica que no desarmada al socialismo por la cual optó Venezuela, no cuenta con enemigos leales. Dentro de Venezuela están los que cada día pierden más poder, control y hegemonía. Los terratenientes expropiados y los dolientes de la renta petrolera. Los grandes importadores y comerciantes. Los agentes económicos del imperialismo yanqui y europeo, sobre todo español. Los grandes corruptos
de la Cuarta República, que aún perviven en los cascarones que quieren reconstruir de los Partidos de AD y COPEI y sus sucedáneos.
Los enemigos del proceso bolivariano han visto cómo se van de sus manos PDVSA, el latifundio, las mieles del Estado y del gobierno, cómo se atacan los eslabones centrales de la producción y se nacionalizan los servicios, los medios de producción, la distribución y el comercio. Cómo se construye otra hegemonía paulatinamente, enfrentando los valores perversos capitalistas que ellos creían inmortales y surgen los valores humanistas, solidarios, socialistas.
Ven como surge un pueblo cada día más bolivariano, un pueblo con más conciencia de su papel y sus derechos. Un pueblo que está convencido que la Patria es América. Contra eso se enfrentan y en su lucha, la oligarquía desata toda su potencia, apoyada descaradamente por el imperio yanqui, su gobierno y factores de poder.
Batalla de ideas y de hechos
La lucha por la hegemonía en Venezuela es diaria. Los gigantescos logros sociales del gobierno bolivariano no los destaca ninguna prensa internacional, miremos algunos de ellos:
. Bajar la pobreza extrema a 7,2% (de doce millones de pobres se redujo a dos millones) según cifras del 2009. Estaba en el 42% al momento de la asumir la presidencia el Cdte. Hugo Chávez Frías en 1999.
. El coeficiente de Gini que muestra la desigualdad de ingresos entre la población más rica y la más pobre (va de 5 máxima desigualdad a 0) pasó de 0,4874 a 0,3928, situándose Venezuela como el país menos desigual de América Latina para el año 2009.
. El desempleo se redujo en 27% desde 1990 hasta 2009, al llegar a 7,5 %.
. La inversión social acumulada durante el Gobierno Revolucionario (en el período 1999-2009) es de aproximadamente 330.600 millones de dólares, cinco veces más que la inversión acumulada de los últimos 11 años (1988-1998) de gobierno de la oligarquía.
. Para el 2009 se redujo en casi 71% la desnutrición de la población con respecto a 1998-2000.
. El Gobierno incrementó el porcentaje del Producto Interno Bruto (PIB) destinado para la educación: en el año 2000 lo llevó a 5,4% y a 6,3% en 2008.
. Se erradicó el analfabetismo. 1.678.671 de personas entre 2003 y 2009
aprendieron a leer y escribir.
. Venezuela es el quinto país del mundo con más matrícula universitaria. El segundo de América después de Cuba.
.
El Gobierno Bolivariano inició el programa nacional aeroespacial y alcanzó, en 2008, la puesta en órbita del primer satélite venezolano (Simón Bolívar) que se encuentra transmitiendo a todo el territorio nacional.
. 800.000 niños escolarizados tendrán su computadora portátil al finalizar este año 2010.
Los resultados de septiembre 26
Dentro de esta gigantesca batalla de ideas y de hechos la hegemonía se pelea cotidianamente. La respuesta del pueblo al llamado del Partido Socialista para estas elecciones no estuvo dentro de las expectativas que se habían estimado. La meta de alcanzar las dos terceras partes de la Asamblea Nacional no se logró. Esta mayoría es necesaria para transformar o crear cualquier tipo de leyes, elegir funcionarios estatales como el Contralor, el Procurador, el Fiscal, el Defensor del Pueblo, los magistrados del Tribunal Superior de Justicia y reformar la Constitución.
Los resultados finales dieron la mayoría absoluta para el PSUV con 98 diputados. La MUD logró 65 y el PPT llegó a dos. Esto les da tranquilidad a los revolucionarios y les permite trabajar con holgura los nuevos caminos y pensar las nuevas batallas por venir.
Sin embargo desde otra óptica los resultados mostraron un país dividido en tres: una abstención de más del 35 por ciento. Y 5 millones y medio de cada lado con una diferencia de apenas 100.000 votos.
De un lado un bloque fuerte y más o menos homogéneo que votó por los candidatos del Partido Socialista Unido de Venezuela y del otro un bloque disperso, unido por las necesidades que obliga el sistema electoral venezolano. Más de 20 partidos y grupos, con sus candidatos y posiciones diversas se agruparon en la llamada MUD, rebautizada como la Mesa de la Ultraderecha.
El PSUV se consolidó como el partido de la hegemonía revolucionaria en Venezuela. Millones de militantes y una cada vez más clara estrategia
política y partidaria lo hacen una verdadera fuerza de masas que impulsa su nación hacia el socialismo bolivariano del siglo XXI. Fue sin discusión un nuevo paso en la maduración de este Partido que lleva de creado no más de tres años.
Lo que viene
Los revolucionarios venezolanos y entre ellos principalmente el Comandante Hugo Chávez, están realizando un profundo análisis de los resultados de las elecciones. Las causas de la votación, del reencauche de algunos partidos de la contrarrevolución, de la abstención.
Las nuevas tácticas, la autocritica y la conciencia de la realidad están al orden del día en la agenda de los socialistas bolivarianos. Es ingente el trabajo por hacer. En que todo el pueblo haga suyo el proceso revolucionario y se encarne en la revolución está la clave. El trabajo político y organizativo es la base del crecimiento del consenso. La profundización del protagonismo y participación popular en las decisiones y construcciones principales. Juegan además las realizaciones del gobierno y que el pueblo las conozca.
La Asamblea Nacional se afirma ahora como escenario de grandes confrontaciones. El pueblo venezolano todo - los descreídos, los que están con el proceso y los contrarrevolucionarios- tendrá la oportunidad de ver en ejercicio los lideres elegidos y su comportamiento en defensa de las libertades, la democracia alcanzada y la profundización de la justicia social. La verdad se conocerá en las transmisiones en directo por la TV de las propuestas y los debates parlamentarios.
La decisión de un pueblo
La política se sigue encausando por las vías pacíficas. La dialéctica de las ideas se conjugó en estas elecciones.
Con once años en el gobierno y en el marco de una profundización paulatina de las contradicciones, de los avances de la revolución, de la necesidad de cualificar el Poder Popular, el pueblo de Venezuela, su gobierno y Fuerza Armada reafirmaron la disposición a dirimir sus contradicciones en paz, a vivir en libertad, en democracia participativa y a avanzar en las conquistas y en el camino de la revolución.
La vía escogida para la construcción del socialismo bolivariano se reafirmó este 26 de septiembre. El imperialismo yanqui y la oligarquía contrarrevolucionaria quedaron notificados ante el mundo de esta decisión soberana y deben respetarla. Venezuela bolivariana sigue optando por la búsqueda pacífica del consenso.
EN BOLÍVAR NOS ENCONTRAMOS TODOS
VOCES DE COLOMBIA
El sáb, 30/10/10, Jose Hurtado
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