Cuba
sigue andando
Pablo Mora
Reivindicando la memoria del Apóstol José Martí,
el 26 de Julio de 1953 sigue andando. La Revolución, fincada en la concepción
independentista de Martí, ha ido yendo, mirando lejos y actuando en
consecuencia, puesto que un principio justo desde el fondo de una cueva puede
más que un ejército. El verdadero hombre, el verdadero pueblo, no miran de qué
lado se vive mejor, sino de qué lado está el deber, de qué lado el devenir de
la utopía, es decir, del sueño. De este modo, la Revolución Cubana
ha despertado la conciencia latinoamericana y la del mundo, ha enseñado a ver,
a pulsar las grandes injusticias, los grandes ideales, a considerar las grandes
patrañas o mentiras.
A punta de limpia resistencia, Cuba ha sido capaz
de vencer el bloqueo genocida y la guerra económica a partir del histórico
aldabonazo de aquella célebre mañana de Santa Ana, con el asalto al Moncada. A
pesar de que el oportunismo imperial pretendió propinar el golpe de
gracia a la Revolución, apoyado en
su rapaz legislación, luego del derrumbe del campo socialista en Europa y la
desintegración de la URSS,
Cuba, faro que traza porvenires, profundizó aceleradamente los conocimientos,
la cultura general y la conciencia pública de puertas adentro y de cara al
mundo, siendo su mayor aporte a la humanidad su propia Revolución, claro
ejemplo de defensa de los valores humanos para los seres más humildes en su
justiciero afán de libertad.
Cuba ha confirmado, desde estas tempestades del
Caribe, entre la furia del viento y del mar, que sabe que es posible soñar, que
el sueño forma parte de nuestra realidad tropical, consecuencia legítima de la
genuina utopía concreta. En su permanente defensa de la cubanía, enarbola,
profundiza y perfecciona el respeto y la comunicación con el pueblo de modo
participativo, la convicción de que la transformación social radica en la
capacidad del hombre para transformarse a sí mismo, transformando su entorno.
Su continua solidaridad mundial es más que
ejemplar. Incontables las tierras adonde los cubanos a tiempo han acudido a
hacerle frente a una peste, un huracán, un terremoto, un agravio, una sinrazón,
una agresión, un abuso, una usurpación. Viet Nam, el Congo, Bolivia,
Mozambique, Tanzania, Armenia, Angola, Nicaragua, Granada, Zimbabwe, Gambia,
Nigeria, nuestro Vargas, bien lo saben.
La alfabetización abrió su desarrollo cultural.
Allí, cultura y nación forman binomio indisoluble. Su ámbito artístico revela
el mundo mágico latente en su cotidianidad. La tradición popular refleja su
acendrado mestizaje sustancial. El milagro de la isla delata su destino
proyectado hacia la futuridad. Totales los vínculos con los sueños amerindios,
con la dimensión humana de nuestra (su) espiritualidad. De amanecer a amanecer,
Cuba investiga, crea, produce, absorbe lo mejor, mientras, en esperanza
abierta, defiende sus conquistas, sus sueños e ideales.
Que sea Frei Betto quien concluya este apunte:
“Hablar de Cuba, hablar de Fidel, es hablar de cómo vamos a ayudar a este país,
a reinventar el socialismo, después del desplome del Muro de Berlín,
de la Unión Soviética,
después de los caminos muy raros que China ha abrazado. Lo que se plantea para
nosotros, es cómo reinventar el socialismo. En el sentido de que el socialismo,
antes que ser un proyecto de desarrollo, tiene que ser un proyecto de
humanidad, de civilización, de virtudes humanas. Creo que Fidel se ha
adelantado en la historia. Va a ser siempre una persona que va a servir de
ejemplo, como el Che, que ha dado su vida por los más pobres. Estaba ya en el
poder, podría haberse quedado tranquilo, pero ha abierto mano de todas sus
funciones y privilegios, para de nuevo empezar desde cero como un hombre
clandestino primero en el Congo y después en la selva de Bolivia, para servir a
la liberación de Bolivia y de América Latina.
Me explico mejor. Yo creo que uno de los errores
de la revolución soviética, fue cambiar el sistema, sin cambiar el modelo. El
modelo soviético, era un modelo zarista. Los carruajes del zar, fueron
sustituidos por los coches lujosos del Kremlin. Y la nomenclatura era como la
corte. Entonces, lamentablemente, ésta es una tendencia que hay en la historia,
que cuando un grupo llega al poder, como ha pasado en la Revolución Francesa
y en otros lugares, tiene la tendencia de mimetizar a su antecesor, con nuevo
lenguaje, nuevas intenciones, pero las estructuras básicas son los restos
políticos, la reproducción de su antecesor. En Cuba no hubo esto. Cuba pudo
crear una revolución original, que mantuvo incluso la religiosidad de su
pueblo.
Acá no hubo una represión a la religión por ser
religión. Siempre hay un respeto al sincretismo religioso cubano, que es muy
parecido con el que hay en Brasil, sobre todo en Bahía. Toda la vena poética,
musical, humorística de la cubanidad, todo eso ha sido valorado por la
revolución. Eso explica por qué, a pesar de todas las presiones y dificultades,
Cuba queda como un ejemplo. A pesar de que hoy Cuba es una cuádruple isla: una
isla geográfica, una isla por ser el único país socialista de Occidente, una
isla por estar bloqueada por los EE.UU., y una isla por tener un modelo de
sociedad que al mismo tiempo es único, y es solidario con todos los pobres del
mundo. Cuba tiene maestros y médicos en más de 40 países del mundo. Creo que
esto crea un ejemplo y una esperanza para nosotros, que queremos construir un
nuevo proyecto civilizatorio.
saguete@gmail.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario